Uno de los eventos relacionados con la Navidad más característicos que tiene Mónaco cada año, es el denominado “Chapuzón de Santa Claus”, un evento en el que cientos de personas disfrazadas como este entrañable personaje, se dan un chapuzón helado en las costas del Principado, con fines absolutamente benéficos.
De hecho, este encuentro se produce con el principal objetivo de recaudar fondos para distintas iniciativas benéficas, y en el mismo participan colaborando no sólo las personas que finalmente ingresan al helado Mar Mediterráneo, sino también todos los que estén dispuestos a hacer un esfuerzo y ayudar a los que más lo necesitan.
Este evento, que se desarrolla gracias a la Asociación TATSA desde hace siete Navidades, es ya conocido como el “baño caritativo de Navidad en la playa de la Rosa”, con hasta 200 residentes locales que aprovecharon la ocasión este año para ingresar en las aguas, saliendo de las mismas prácticamente al instante, por las temperaturas de hasta 13 grados centígrados.
En general, es bueno destacar también, cada uno de los participantes acudía con una suma cercana a los diez euros, aunque no existe una cifra establecida para poder colaborar, antes de ponerse el bikini o bañador y el gorro de Santa Claus y sumergirse, directamente para poder dar una mano aunque este año no estuviera presente Alberto de Mónaco, quien incluso alguna vez se ha metido también al Mediterráneo como parte de esta movida solidaria.
Vía e imagen: La Voz Libre