Este último fin de semana se desarrolló una nueva edición del Gran Premio de Mónaco de la Fórmula 1, donde todos los días, incluyendo los ensayos previos, demostraron que Nico Rosberg debía ser el ganador de la competencia, como una especie de homenaje a su padre Keke, que se impuso hace justamente 30 años en el Principado.
Lo curioso del caso es que, además, Rosberg es el piloto de la categoría que se encuentra más directamente relacionado con Mónaco, considerando que de hecho se crío a muy pocas cuadras del circuito principal de Montecarlo, por lo que incluso muchos residentes locales tomaron el triunfo como propio.
De todos modos, volviendo a lo que fue una de las carreras más accidentadas en lo que llevamos de temporada, no podemos dejar de mencionar que Vettel y Webber, ambos con Red Bull, completaron el podio, bastante por delante del español Fernando Alonso, quien tuvo una de las peores actuaciones de los últimos tiempos.
Justamente, en cuarto lugar terminó el británico Lewis Hamilton, por delante de Adrian Sutil y el propio Jenson Button, hasta que llegamos a la séptima ubicación de Alonso, que no fue tan mala si consideramos al mismo tiempo que Kimi Raikonnen, segundo en la general, terminó apenas en la décima posición.
Vía e imagen: Cancha Llena